Capitulos 106 y 107

Tori/Touko seguía en los brazos de Harley/Tsunami y este le acariciaba suavemente el pelo. Posiblemente todos los jugadores ya faltaban los animos y risas del peliatún pero este estaba algo más ocupado. La pelirroja se sentía muy bien... su cabeza estaba hundida en el pecho del chico y las caricias que le hacía le daban sueño quería quedarse allí. Para siempre.

-¿Mejor?- le preguntó el chica cariñosamente al cual la chica asintió con la cabeza

-Gracias...- murmuró- creo que me siento mejor...

-Entonces... no estoy haciendo bien mi trabajo- cogió a Tori/Touko de los brazos apartandola de él y haciendo que ella le mirara a los ojos- No soporto que estes triste... ¿sabes? Cuando lloras me siento peor que... un muerto- el mayor paró unos segundos para seguir hablando- Tienes que sentirte bien... has dejado dos litros de agua en mi camiseta y si aun no has llorado lo suficiente, sigue llorando porque yo voy a estar contigo... siempre, ¿me oyes Tori/Touko? ¿Sabes por qué te besé en la despensa?

Tori/Touko negó con la cabeza. Siempre se había hecho aquella pregunta pero... no lo sabía.

-Porque no podía más- se sinceró- Te veía y... me daban ganas de abrazarte, de decirte que te quiero. Aquella noche estaba apunto de estallar y tenía que decirtelo... Tori/Touko si tú te fueras moriría... te lo juro.

-Harley/Tsunami...- le llamó ella- Yo no me iría sin ti, eres el hombre más especial, cariñoso y único del mundo- se acercó a él- Mi vida no tendría sentido sin ti.

-Entonces Tori/Touko- el chico se alejó de ella un poco- No creo que pueda aguantar más con esta relación de novios

Los ojos de Tori/Touko se llenaron de lágrimas... ¿iba a dejarla? Su voz se quebró y sus manos empezaron a temblar... no quería, no quería separarse de él.

-Harley/Tsunami... porfavor... no quiero cortar- pudo decir en un susurro

-No, Tori/Touko. Pelirroja yo en verdad quiero que sea algo más- le dijo, esta levantó la cabeza con una chispa de alegría en sus ojos- Querida Tori/Touko, cuando se termine el torneo... ¿te casarías conmigo?

Abrió los ojos de la pura impresión, no pensaba que él... le fuera a pedir aquello. Sus ojos se llenaron de lágrimas, lágrimas de alegría, asombro y de emoción. No podía contener aquellas emociones por mucho tiempo más. Se lanzó a los brazos de su amado.

-Sí- le dijo mientras colocaba sus brazos en torno a su cuello- Me casaré contigo, te amo Harley/Tsunami

-Yo tambien te amo, pelirroja- dijo mientras rozaba sus lábios- En cierto modo- su mano se colocó debajo de la camiseta de la chica aciendo que se sobresaltara- ¿Cómo llamas tú cuando dos personas...?- Tori/Touko no le dejó terminar

-No pienso decirlo- dijo poniendo voz de enfado- Hay más maneras como... hacer el amor, mostrase el amor o simplemente foll...- se tapó la boca... iba a volver a decir aquella palabra, Harley/Tsunami se rió

-Muy bien...- dijo mientras le besaba el cuello cariñosamente- Demostremos cuanto nos queremos o...- se rió- ¿Folla...?- no le dejó terminar porque ella con su mano derecha había cogido sus partes haciendole callar al instante

-¿Qué decias?- le preguntó con una sonrisa maliciosa y sensual- ¿Me repites?

-N-nada- dijo, intentó quitar la mano de la menor de aquel lugar pero solo hizo que apretara más fuerte- S-suelta eso loca- le intentó gritar

-Jamás, - le besó la frente- ¿Qué vas a hacer...?

La frase no salió de su boca para la sorpresa de ella, Harley/Tsunami la había acercado a él y con sus manos le había cogido sus pechos. Haciendola gemir y tuvo que aflojar la presión que había hecho con su mano.

-¿Q-qué hacer?- le preguntó algo sonrojada

-Tomar cartas en el asunto- le dijo traviesamente- Suelta, se me van a explotar los huevos

-¡Sueltame tú a mí!- le gritó, pero él masajeó los pechos con sus dos manos

-Son muy cómodos, elige o me sueltas o tendré que juguetear con ellos sin camiseta y sin sujetador.

La pelirroja suspiró y rendida soltó las partes de Harley/Tsunami cuando ya no hubo presión ni agarre, el surfista, se avalanzó contra ella tirandola al suelo. Ella estaba debajo de él, lo cual le daba poca ventaja en poder ganarle. Sus manos fueron paralizadas por las manos del futbolista que mantuvo las manos quietas agarrandolas por las muñecas.
Sonrió y besó el cuello de la chica poco a poco. Besaba todas las partes que encontraba, dejó paso a la lengua y empezó a chupar el suave cuello de la chica haciendola gemir, esta cerró los ojos y dejó que él hicera con ella lo que quisiera.